Porque te comportas con ellas como el típico chico bueno que las aburre.
Porque en una relación debe haber polaridad y en tus relaciones siempre acabas comportándote como una mujer: mensajitos, cariñitos, detallitos…
…y no le dejas otra opción a ella que buscarse fuera lo que no encuentra dentro: masculinidad.
Verás…
¿Por qué no tengo suerte con las mujeres?
Muchos hombres se acercan a las relaciones con buena fe, buenas intenciones… y una idea equivocada de lo que significa ser honesto y respetuoso.
Y esa idea, lejos de ayudarte, es justo lo que te está saboteando y haciendo que te preguntes siempre lo mismo:
“Por qué me va siempre mal en el amor”
Has creído que hablar con varias chicas mientras conoces a una es “deshonesto”.
Has pensado que si una chica (con la que no tienes nada exclusivo) te deja caer que le gustaría que dejaras de ver a otras, debes aceptar para no lastimarla.
Y probablemente también creas que, si ella te dice que tú eres el único, esa promesa tiene la misma validez emocional que si la hicieras tú.
Mec. Error. Y uno muy caro.
Como hombre, tu palabra tiene un peso emocional muy fuerte. Si prometes algo, te sientes mal si no lo cumples.
Pero en las mujeres, ese “compromiso emocional” está mucho más vinculado al momento presente.
Cuando una chica te dice: “No me gustaría que quedaras con otras”, lo dice porque en ese instante siente eso.
Pero si dentro de una semana aparece un hombre que ella percibe como más atractivo… ese sentimiento puede desaparecer.
Y no es que mienta. No es que juegue contigo. Se llama hipergamia y es la estrategia reproductiva femenina producto de miles de años de evolución.
Por eso deberías añadir mentalmente una coletilla a cada promesa bonita que oigas de una mujer:
“…en este momento.”
Por tanto a partir de ahora, cada vez que escuches:
- Te amo mucho… (añades: “…en este momento”.)
- Eres el amor de mi vida… (añades: “…en este momento”.)
- No me imagino una vida sin ti… (añades: “…en este momento”.)
Cuando tú das tu palabra, la tomas como algo casi sagrado. Pero estás aplicando tus reglas internas a un juego que no se juega así.
Y lo que ocurre es que te cierras opciones, dejas de ver a otras chicas, inviertes más en ella… justo cuando ella empieza a invertir menos en ti.
Tú crees que estás haciendo lo correcto, y sin darte cuenta, te estás comportando como un hombre menos atractivo para ella.
Y lo peor: cuando llega el momento en que te deja o desaparece, no solo te duele la ruptura, sino que te sientes como un idiota.
Porque te das cuenta de que mientras tú apostabas todo a una carta, ella tenía otros chicos en el banquillo, o simplemente dejó de verte como su mejor opción.
Me va mal en el amor porque todas mis novias me engañan
La infidelidad femenina no es la estrategia reproductiva por defecto en las mujeres.
Si ocurre una infidelidad por parte de ella es porque no tenía otra opción.
La estrategia reproductiva femenina de la mujer programa (evolutivamente hablando) a la mujer para estar siempre buscando su mejor opción.
Ese es el corazón de la hipergamia: moverse hacia lo que siente que es mejor en ese momento.
Por eso el concepto de amor de una mujer es oportunista y el de un hombre es idealista.
Por tanto:
Cuando una mujer está con un hombre, sigue validando sus opciones y preguntándose siempre lo mismo:
¿Es esta mi mejor opción… o podría hacerlo mejor?
Al mismo tiempo, en muchas ocasiones, sigue recibiendo mensajes y dejando la puerta medio abierta a posibles sustitutos.
¿Y tú?
Tú estás ahí pensando que hablar con otras es “infidelidad emocional”. Que mantener una amiga con tensión sexual es “una falta de respeto”.
Mientras ella está decidiendo si te sustituye o no, tú has borrado todas tus opciones.
“Pero Dani, si no hago eso estaría faltando el respeto a mi novia”
No te estoy diciendo que seas infiel, te digo que no seas tonto.
No necesitas acostarte con otras para mantener tu marco.
Pero una mujer siente más atracción cuando está con un hombre que percibe que podría estar con otras.
Y si tú no paras de recordarle lo importante que ella es para ti, ella empezará a percibirte como un hombre menos atractivo.
¿Porque lo digo yo?
No. Porque la hipergamia predispone biológicamente a las mujeres a buscar siempre un hombre que esté por encima en el valor de mercado.
¿Cómo evitar que te rompan el corazón?
- Deja de proyectar tu sentido del honor en ella.
Lo que tú ves como una promesa firme, para ella puede ser una emoción del momento.
Tu concepto masculino de honestidad no es igual a su concepto femenino de honestidad.
- Entiende la naturaleza femenina sin odiarla.
Esto no va de juzgar, va de comprender cómo funcionan la naturaleza y la psicología femenina.
- Nunca cierres tus opciones por alguien que aún no ha demostrado ser tu pareja real.
Si no hay un compromiso firme, tú no tienes ninguna obligación moral de ser exclusivo.
Por tanto: no cortes relaciones con otras chicas solo porque tu ligue actual te lo sugiere.
Al final se trata de jugar con las mismas reglas que juegan ellas.
Y si no quieres acabar llorando y repitiendo una y otra vez el mismo fracaso amoroso con diferentes mujeres…
Más vale que empieces a actuar desde el conocimiento y no desde la ingenuidad.