Si preguntas a los hombres qué es lo que más atrae a una mujer, la mayoría lo tienen claro:
- El físico.
- El dinero.
Punto.
Y luego están los que creen que todo se reduce a tener “labia” o ser un tipo gracioso.
Bien, ¿y si te digo que no es así y que la mayoría se equivoca?
Supongo que pensarás: “sí claro, porque tú lo digas”.
Por tanto, lo mejor será entonces que no me hagas caso a mí, sino a la biología evolutiva que es la que determina qué nos atrae y por qué.
Mira.
¿A que podrías adivinar que la mejor forma de abrir el apetito de una persona es enseñándole alimentos dulces y calóricos?
¿Por qué hablarle de verduras o enseñarle una ensalada a una persona NO va a producirle ningún apetito a diferencia de si le hablas de postres y bollería?
Porque los seres humanos estamos cableados (o programados) evolutivamente para responder de determinada manera a ciertos estímulos.
Pasa con la comida.
Pasa con el miedo (sí, no eres el único que tiene miedo de tarántulas gigantes venenosas).
Y sí, también pasa en nuestras relaciones.
La atracción NO es una elección.
Ni para ti, ni para mí.
Y por supuesto, tampoco para ellas.
En este artículo vas a descubrir qué es lo primero que mira una mujer (según la biología evolutiva y la ciencia) en un hombre, qué valoran ellas realmente y qué aspectos restan atractivo.
¿Qué es lo primero que una mujer mira en un hombre?
Según los estudios lo primero que va a captar la atención (no necesariamente generar atracción) de una mujer va a ser:
Tu cara.
Tu cuerpo.
Concretamente, a nivel evolutivo, se busca simetría y ángulos marcados.
Ahora bien:
Si esto fuera tan fácil…
Cualquiera que se ponga a hacer dieta y se apunte a un gimnasio tendría 0 problemas con las mujeres, le lloverían las oportunidades y el “misterio de la atracción femenina” no daría ni para 1 minuto de debate.
Sin embargo lo que vemos a menudo es que sí, mejorar tu físico, te hace más llamativo pero no te garantiza abundancia de relaciones con las mujeres que a ti particularmente te gustan.
Lo cuál se agrava aún más cuando ves en tu entorno (o en personas conocidas) cómo otros hombres (menos trabajados físicamente que tú) consiguen más resultados con las mujeres que tú.
Una forma de verlo para entender de una vez por todas cuán importante es un físico es la siguiente:
Imagina al tío más atractivo físicamente del mundo.
Por poner un ejemplo, piensa en Brad Pitt o Jason Momoa.
Ahora imagina que no son famosos (de esta forma quitamos el peso del estatus en la atracción para centrarnos sólamente en el físico).
Bien.
Tenemos a Brad Pitt o Jason Momoa hablando con una chica en un bar que no tiene ni idea de quiénes son pero a la que obviamente le ha llamado la atención el físico de ambos.
En un momento de la conversación nuestros atractivos sujetos le sueltan a la chica el siguiente comentario:
Oye… tengo que decirte algo.
Yo lo he pasado muy mal con las mujeres en mis relaciones anteriores. Al final, por una cosa o por otra, siempre me acaban siendo infiel y dejándome por otro.
Pero te he visto a ti en el bar y ahora que estoy hablando contigo… no sé. Tienes algo que te hace especial y no quiero asustarte pero estoy empezando a sentir algo por ti.
Te veo tan dulce y tan bonita que… no sé. Siento como las típicas mariposas en el estómago.
Pero no quiero sufrir de nuevo por una chica que no me corresponde o que luego, a las primeras de cambio, se va con otro.
Por eso prefiero decírtelo claro: ¿te gustaría ser mi novia?
Ahora mismo tengo muchas ganas de darte muchos besitos. Despiertas una parte muy tierna en mí.
Te quiero.
Bien. Imagina soltar semejante parrafada a una mujer.
La pregunta es:
¿Crees que la chica va a sentir atracción o que la va a perder?
Y si en lugar de soltar la parrafada, simplemente llega a la chica en la barra y le dice:
Hola, ¿cómo te llamas?
Verás me he acercado porque eres muy atractiva y me gustaría tener se*o contigo esta noche. ¿Vienes a mi casa?
Misma pregunta:
¿Crees que la chica va a sentir atracción o que la va a perder?
Lo más probable es que la respuesta de la chica en el primer caso sea algo así como:
Ohh, lo siento pero es que tengo novio… Y tengo que ir al baño ahora
**y desaparece para siempre**
Y en el segundo caso seguramente se ofenda y te diga que qué te has pensado que es ella para decirle eso.
Sin embargo, en el segundo caso, si es una chica la que le dice eso una noche en un bar a un chico… lo más probable es que el tío, como mínimo, lo juegue un poco más.
¿Y para qué me cuentas todo esto?
Porque esto demuestra que la atracción en una mujer no se basa SOLO en el físico.
Porque con el mejor físico del mundo, puedes seguir haciendo cosas que echen por tierra toda la atracción.
Por tanto, la clave para la atracción no es tanto el físico sino el comportamiento.
Verás:
Cuando una mujer mira un físico no ve lo mismo que cuando un hombre mira un físico.
Recientemente una encuesta en X (antiguo Twitter) sobre el físico de Olly Murs se viralizó:
En esta encuesta se mostraba una imagen de Olly Murs antes y después de una transformación física en el gimnasio durante 12 semanas que le hizo tener un cuerpo atlético.
Se hacían 2 preguntas:
- ¿Crees que se ve mejor antes o después?
- ¿Eres hombre o mujer?
Los resultados hablan por sí solos:
El 43% de los hombres decían que Olly Murs estaba mejor después.
Solo el 7% de las mujeres elegían el “después”. El 27% de ellas decían que estaba mejor antes.
Obviamente no hay que ser Séneca para darse cuenta de que las mujeres dicen una cosa pero luego su comportamiento las contradice.
Sin embargo, lo que refleja esta encuesta viral es que las mujeres no ven lo mismo que los hombres cuando miran un físico.
Me explico.
Cuando las mujeres evalúan el atractivo masculino, rara vez lo hacen basándose únicamente en la apariencia física.
Las mujeres interpretan el cuerpo de un hombre como un indicador de su estilo de vida, sus valores, su disponibilidad emocional y su compatibilidad a largo plazo.
Y, según en la etapa vital en la que se encuentre una mujer, es posible que le dé más peso a unos atributos que a otros.
En cuanto a la atracción física pura, obviamente el cuerpo de “después” de Olly Murs es claramente el ganador. Está más delgado, más musculado y simplemente parece más optimizado biológicamente para el atractivo sexual.
Pero las mujeres generalmente no se detienen en la atracción superficial. Suelen adoptar una visión más amplia preguntándose (consciente o inconscientemente) qué dice un cuerpo así sobre el hombre que lo tiene.
Por tanto, según la biología evolutiva, a corto plazo la muscularidad, el físico y la simetría va a captar más la atención PERO:
La atracción NO la va a determinar el físico aislado sino la suma de todas las señales que transmiten valor genético y social.
Para un hombre casi todo el peso recae en el físico de forma aislada a la hora de sentir atracción por una mujer. Por eso cuando se hacen este tipo de encuestas, los hombres eligen el “mejor físico”.
Sin embargo:
Las mujeres escanean inconscientemente tu potencial reproductivo, tu estatus relativo y tu actitud dominante. Esto NO significa dinero o poder explícito, sino lo que proyectas sin decir una palabra. La suma de todas esas pequeñas señales.
Porque sí, el físico y una cara bonita “te abre la puerta” (aka capta la atención). Pero lo que determinará que una mujer sienta atracción o no (aka lo que te permite entrar) es algo más.
En concreto, lo primero que observa una mujer más allá de esa primera impresión que capta su atención es:
- Tu postura corporal: desde el cómo caminas, hasta lo erguido que lo haces, también si ocupas espacio o si tu cuerpo proyecta energía y control.
- Tu lenguaje corporal: los hombres tensos, inquietos o rígidos generan rechazo de inmediato (por muy musculosos que estén), mientras que los hombres relajados y seguros generan atracción.
- Tu tono de voz: un tono firme, grave, pausado y estable comunica testosterona, dominancia y liderazgo.
- Tu mirada o contacto visual: una mirada dominante y masculina es más atractiva que un hombre con mirada huidiza y evitativa.
Todos estos elementos conforman lo que se llama presencia masculina. Y eso es lo que, según la experiencia y la ciencia, una mujer nota primero. Mucho antes que tus abdominales o tu cuenta bancaria (especialmente porque no los vas mostrando por ahí).
Además, estos elementos son honest signals (señales honestas).
Los honest signals son características, comportamientos o rasgos que comunican información veraz sobre la calidad genética, la salud o el valor como pareja de un individuo.
Se llaman “honestas” porque no se pueden falsificar fácilmente sin un coste real, lo que garantiza que sean fiables. Un ejemplo claro es la cola del pavo real o los cuernos del ciervo macho.
Pero entonces…
¿Qué valoran las mujeres en un hombre?
Bien.
Ahora que has captado la atención con un físico relativamente cuidado (sin tener que ser Mr. Olimpia).
Y has generado los primeros destellos de atracción con tu presencia masculina…
…viene la parte difícil:
Hacer que se sienta 100% atraída por ti y te desee.
Más allá de lo físico, hay una serie de rasgos que las mujeres valoran porque te hacen un hombre más atractivo e interesante.
Para ello debes saber DOS cosas sobre la biología y psicología evolutivas en las mujeres:
Cosa 1:
Que su estrategia reproductiva (hipergamia femenina) es dual y eso hace que las mujeres busquen una serie de atributos diferentes en un hombre en el corto plazo (reproducción) y en el largo plazo (provisión).
Cosa 2:
Que la atracción en las mujeres funciona como una rueda de volumen y va fluctuando en función de lo que ella percibe de ti a través de tu comportamiento.
A diferencia de los hombres cuya atracción funciona más como un interruptor de encendido/apagado.
Por tanto:
Que de primeras hayas captado su atención con una buena primera impresión y que le hayas parecido interesante por tu presencia masculina…
…no implica que vaya a sentirse atraída y despiertes deseo sexual en ella.
Y viceversa.
Los aspectos clave que marcan la diferencia a la hora de despertar ese deseo son:
Tu actitud y personalidad masculina.
Tu forma de comportarte con el mundo y las mujeres revela mucho de ti.
Si tu comportamiento proyecta seguridad, juego, dirección y dominancia, la atracción aumentará.
Si tu comportamiento proyecta necesidad, miedo o búsqueda de aprobación, la atracción caerá.
No se trata de «caer bien» sino de generar emociones y mostrarte como un hombre con opciones. A muchas mujeres les atrae un hombre seguro de sí mismo, especialmente si sabe cómo superar los test o pruebas que una mujer puede ponerle.
Tu sentido del humor.
No significa que seas el payaso del grupo o el bufón que hace chistes todo el rato.
Significa no tomarte demasiado en serio ni a ti mismo, ni a ella ni a la interacción o relación con ella.
Significa disfrutar el momento y pasarlo tan bien que sea imposible que ella no se ría contigo.El estar de buen humor y el humor bien calibrado genera confianza, complicidad y demuestra preselección e inteligencia social.
Más allá de los atributos físicos: tu estilo y apariencia.
No hablo de físico ahora. Hablo de tu estilo y apariencia.
Es decir: higiene, vello corporal y facial bien cuidado, tu forma de vestir, etc. Todo ello envía un mensaje sobre tu autopercepción.
Ambición, competitividad y metas claras.
Un hombre con objetivos, que sabe a dónde va y tiene un gran sentido de la ambición y una alta competitividad, genera atracción porque transmite estabilidad, dirección y potencial de futuro.
(Si te fijas, con estos atributos estamos apelando a la segunda parte de la estrategia reproductiva femenina o hipergamia).
Las mujeres buscan hombres con proyección, especialmente en el largo plazo de cara a una relación de pareja.
No hace falta que ya lo tengas todo, pero sí que vayas a por ello.
Hay una frase en la comunidad de la Red Pill que dice:
Los hombres valoran el pasado sexual de las mujeres tanto como ellas valoran el futuro financiero de un hombre.
Competencias masculinas y habilidades prácticas.
Ser un hombre competente es crucial:
Saber resolver problemas, defenderte en la vida, liderar, ser resolutivo…
Todo ello genera mucha atracción y una gran sensación de protección que las mujeres valoran mucho. Tanto en el corto como en el largo plazo.
Inteligencia emocional
Saber leer los distintos contextos sociales y reaccionar con templanza sin explotar o perder “tu centro” ante situaciones emocionales complejas es otra actitud atractiva.
Además de proyectar preselección, te hace ser percibido como un hombre con confianza a prueba de balas.
Esto no significa ser un sensiblón, sino ser un hombre que sabe sostener la tensión emocional sin venirse abajo.
Que a las mujeres les gusten los hombres con una alta sensibilidad no quiere decir que les atraigan para tener relaciones con ellos.
Responsabilidad
Un hombre que se hace cargo de su vida, sus problemas y que entiende que está en su mano resolverlos.
Un hombre que cumple su palabra y que no va dando lástima.
Esto es muy atractivo porque proyecta estabilidad, masculinidad y madurez.
Amabilidad selectiva
La amabilidad es una de esas características que solo es atractiva cuando viene de un hombre con opciones.
Si eres amable desde un lugar de necesidad, parecerá debilidad. Pero si lo haces desde la elección y la abundancia, marcará la diferencia.
Riesgo, atrevimiento y valentía (capacidad de ejercer violencia)
Otro de los disparadores de atracción más viscerales y automáticos en una mujer es la capacidad de un hombre para asumir riesgos y reunir el coraje y la osadía suficiente para “dar un paso al frente” cuando la situación se vuelve intimidante.
El hecho de que seas capaz de ejercer violencia física en una situación de emergencia también es una característica muy masculina y atractiva.
Cuando un hombre reúne todos (o la mayoría) de estos elementos, es casi automático que la atracción y deseo por parte de la mujer aumente.
No obstante puede que en algún momento de la conversación con ella te surjan dudas acerca de su interés.¿Cómo saber si le gustas de verdad? El lenguaje corporal femenino cuando le gusta un hombre puede darte pistas más claras que cualquier frase.
¿Qué es lo que hace menos atractivo a un hombre?
Ya hemos comentado las principales características que buscan las mujeres en un hombre.
Sin embargo…
Como hemos visto al principio de este artículo, hay aspectos que te restan atractivo de forma inmediata. Por mucho que tengas un buen físico o una increíble conversación.
Algunos de estos aspectos que aniquilan tu atractivo son:
- Buscar aprobación constantemente.
- Actuar desde la necesidad.
- Falta de objetivos o dirección.
- Quejarte de todo o culpar al mundo.
- Tener una energía (“vibra”) nerviosa, ansiosa o tensa.
- Falta de liderazgo y decisión.
- Actitud cobarde y evitativa ante situaciones complicadas.
Todo esto hace que una mujer sienta que está ante un hombre “sin peso”, sin límites y que no representa ningún tipo de reto emocional.
Y cuando una mujer te ve menos masculino que una ameba, ya puedes tener los abdominales como tu cabeza de grandes que NO vas a resultar atractivo.
