¿Cuál es el lenguaje corporal de una mujer excitada?

Lectura Estimada: 13 min

La ciencia y la biología evolutiva nos deja claro que, cuando una mujer está excitada o siente deseo sexual por un hombre: su cuerpo manifiesta algunas señales.

Muchas de estas señales son inconscientes, automáticas y responden a impulsos biológicos programados por millones de años de evolución relacionados con la atracción sexual.

El problema es que la mayoría de hombres no saben leer estas señales. Acaban descalibrando: avanzando cuando no toca o pecando de paraditos.

Y esto genera tanto frustración y falta de tacto en ellos como insatisfacción en ellas.

En este artículo no te voy a dar el típico listado trillado de seducción de los “5 gestos míticos”.

Vamos a ir más allá: vas a entender por qué su cuerpo reacciona como lo hace cuando está excitada, cuál es la lógica biológica detrás de cada señal, y cómo muchos de esos mecanismos han terminado condicionando aspectos clave de nuestra sociedad actual.

¿Cómo saber si una mujer te desea sexualmente?

El primer paso es entender que la excitación femenina no funciona igual que la masculina.

Al igual que la atracción, la excitación funciona más como una “rueda de volumen” en las mujeres y más como un “interruptor de encendido/apagado” en los hombres.

Por tanto:

Mientras que en el hombre el deseo puede activarse casi instantáneamente y de forma muy evidente, en la mujer suele ser más progresivo, emocional y menos explícito.

Solo tienes que fijarte en el contenido que hombres y mujeres consumen a la hora de excitarse.

Sí, ambos sexos consumen cine X. Pero no conozco a ningún hombre que se excite leyendo “en los zapatos de Valeria”, “50 sombras de Grey” o “La saga Crossfire”.

Todos conocemos más mujeres que consumen ese tipo de lecturas que que entren diariamente a p*rnhub.

Dicho esto.

La excitación es una fase más intensa de la atracción, pero todo suele comenzar con señales del lenguaje corporal femenino cuando le gusta un hombre.

Cuando una mujer siente excitación sexual real hacia un hombre, aparecen cambios físicos y conductuales claros.

Tanto en su lenguaje corporal, como en su tono de voz, en su actitud contigo…

Estos y otros indicadores son los que vamos a analizar uno por uno.

¿Cómo coquetean físicamente las chicas?

El “coqueteo femenino” cuando hay deseo sexual real no es el mismo que ocurre con el típico tonteo superficial o social.

En el primer caso hay signos específicos que indican excitación sexual creciente mientras que en el segundo caso simplemente hay cierta atracción.

Vamos a analizar estos signos:

Mirada profunda y sostenida

Cuando una mujer siente deseo, su contacto visual se vuelve más intenso y como más “descarado”.

Además, mantiene la mirada durante más tiempo y la acompaña de una ligera sonrisa nerviosa o cierto brillo en los ojos.

Por ejemplo:

Mientras estás hablando con ella notas que te clava la mirada fijamente en tus ojos, parpadea más lentamente de lo normal y sonríe de forma sutil.

Pupilas dilatadas

Un clásico, ¿pero exactamente por qué ocurre?

La dilatación de las pupilas (midriasis) es una reacción biológica involuntaria que ocurre para permitir entrar más luz al ojo cuando:

  • Hay poca luz
  • Hay excitación o activación del sistema nervioso simpático (SNS).

Esta activación del SNS se puede dar por estrés, miedo, deseo sexual, atención o interés.

El SNS no distingue entre “positivo” (deseo) o “negativo” (miedo, estrés). Solo interpreta que el cuerpo necesita prepararse para actuar y por tanto necesita más foco visual (por eso la dilatación de las pupilas).

Por tanto, como ejemplo:

Si estás en un entorno con luz normal (por ejemplo un restaurante) hablando con ella de forma relajada y te das cuenta de que sus pupilas están muy abiertas: es buena señal.

Humedecerse los labios o morderse el labio

Otro clásico.

Morderse el labio es un microgesto que potencia visualmente la atracción, indica excitación, y comunica indirectamente interés sexual.

¿Por qué?

Porque los labios son un marcador sexual secundario que simbolizan fertilidad, salud y receptividad o interés.

Al morderlos:

  • Aumenta el riego sanguíneo y por tanto se vuelven más rojos y carnosos.
  • Llama la atención de la otra persona.
  • Señaliza inconscientemente disponibilidad sexual o interés.

Además, muestra cierta vulnerabilidad, lo cual activa el interés masculino desde una lógica reproductiva.

Por eso, cuando una mujer se humedece los labios frecuentemente o los muerde de forma sutil mientras te mira, suele ser un indicativo de cierto deseo sexual.

Por ejemplo:

Estás hablando con ella contándole algo y, mientras te mira se pasa la lengua por el labio inferior o juega con su labio discretamente.

Postura corporal abierta

Otro signo que se manifiesta en las mujeres cuando hay cierta excitación es que su postura se vuelve más receptiva:

Se inclina hacia ti, deja libres las zona erógenas (cuello, pecho o muñecas) y/o cruza y descruza las piernas mostrando interés.

Por ejemplo:

Estás con ella en una cita y notas que se inclina hacia adelante mientras hablas como si indirectamente te mostrara su pecho o se coloca el pelo hacia un lado manteniendo el cuello expuesto.

Juega con el pelo

Este es otro clásico de los clásicos, ¿pero por qué?

Desde un punto de vista fisiológico, el interés sexual y la excitación genera microansiedad (¿le gusto?, ¿qué pensará?).

Y jugar con el pelo es un comportamiento que libera tensión emocional.

Desde un punto de vista reproductivo:

Jugar con el pelo es un gesto que expone o muestra atributos sexuales secundarios destacándolos frente al posible candidato.

Evolutivamente hablando, un cabello largo, sano y brillante es una señal de juventud, salud y fertilidad (atributos de valor sexual que atraen a los hombres).

Además, “acicalarse” es un gesto de auto-ornamentación inconsciente que se produce porque buscamos “ponernos guapos” cuando sentimos que la persona que tenemos enfrente nos atrae.

Por otro lado y, al igual que ocurría con otras señales, son gestos que manifiestan un lenguaje corporal de ligera sumisión al exponer zonas vulnerables como el cuello.

Lo cual son señales de apertura y no de amenaza.

Por ejemplo:

Mientras hablas con ella notas que constantemente pasa su mano por el pelo, lo acomoda o peina, lo enrolla entre sus dedos o retuerce mechones.

Aumento del contacto físico

Cuando una mujer te toca más de lo normal, por muchas excusas que parezca que hay para explicarlo: está buscando una conexión física.

Y eso, es una señal de interés.

Por ejemplo:

Te toca el brazo mientras te habla, te quita una pelusa imaginaria de la camiseta, intenta “arreglarte la camisa” o roza tus dedos al darte algo.

Cambios en el tono de voz

Entender a nivel evolutivo por qué cambia el tono de voz cuando hay excitación o disponibilidad sexual te ayudará a detectar mejor estas sutilezas.

Verás.

A nivel fisiológico durante la excitación sexual (o cuando hay interés), se activa el sistema nervioso simpático.

Esto cambia la respiración, la humedad de las cuerdas vocales y la tensión muscular provocando un tono más agudo y una voz más suave o melosa.

Pero…

¿Por qué la evolución ha seleccionado naturalmente en las mujeres esta forma de reaccionar ante estos estímulos?

Porque desde un punto de vista evolutivo el tono agudo está asociado a juventud y fertilidad.

Y los hombres se sienten altamente atraídos por estos atributos. Por eso siempre será más atractiva la chica de 24 que la mujer de 48. Por eso:

  • La edad es un tema tan “candente” para las mujeres.
  • Casi el 100% de los anuncios de cosmética van dirigidos a mujeres potenciando el efecto “anti-edad”.
  • Y por eso te dicen que “es de mala educación preguntar la edad a las mujeres” o te hacen sentir un inmaduro si tienes más de 30 o 40 y sales con chicas más jóvenes que tú, especialmente si están en sus 20.

Por tanto:

Las mujeres, inconscientemente, “suavizan” su voz en presencia de hombres que les atraen.

De hecho, según diversos estudios, durante la ovulación las mujeres tienden a tener una voz más aguda, más musical y más atractiva para los hombres.

Y voy más allá:

¿Te suena RoRo (Rocío Bueno)?

Es una famosa TikToker que se hizo viral en España por adoptar un estilo de vida muy tradicional y formar parte del “movimiento” tradwife.

Bien.

Pues una de las características más identificativas de RoRo es su voz suave, dulce e inocente.

Y no, no es su voz natural. Es intencionada.

Se sabe porque se encontraron vídeos suyos en TikTok (antes de la fama) donde hablaba “normal”.

Pues bien, ese tipo de voz que hasta tiene nombre y se llama “fundy baby voice” caracterizada por:

  • Bajo volumen que subcomunica sumisión no amenazante.
  • Tono suave generando un sonido más agudo, dulce y musical.
  • Ritmo pausado que transmite calma y receptividad
  • Melosidad que genera sensación de cuidado, feminidad y entrega.

Activa en el hombre los circuitos de protección y atracción hacia lo femenino vulnerable que son los mismos que se activan ante signos de juventud y fertilidad.

De hecho ahora se entiende mucho mejor por qué hace 50-60 años a las mujeres las “corregía” por hablar de determinada forma o era “feo que una mujer dijera tacos”.

¿Porque vivíamos en una sociedad que oprimía a las mujeres mientras los hombres eran unos malvados villanos?

No.

Porque es un signo de atracción para el hombre y antes no estaba mal visto que las mujeres hicieran cosas por el mero hecho de atraer y complacer a un hombre.

Hoy día que una mujer actúe con el propósito de complacer a un hombre es equiparable al terrorismo.

Por tanto, antes de desviarme del tema:

Si cuando estás hablando con una mujer en privado, notas que baja un poco el volumen, agudiza el tono y sus palabras parecen más íntimas o cargadas de intención: es una buena señal.

Respiración más agitada

Ante el deseo sexual, la respiración se acelera ligeramente. Especialmente cuando hay proximidad física.

¿Por qué?

Porque se activa el sistema nervioso simpático y el cuerpo interpreta que necesita prepararse para actuar y, por tanto sube la frecuencia cardíaca y respiratoria.

Además, se aumenta la oxigenación cerebral lo cual aumenta la atención, la sensibilidad y la intensidad emocional del momento.

Por ejemplo:

Si cuando estás charlando con ella con algo más de intimidad y notas que, sin hacer ningún esfuerzo físico, respira algo más rápido o profundo mientras estáis cerca… es buena señal.

Rubor facial o en el escote

Como hemos visto antes, la excitación dispara el sistema nervioso simpático (y con ello el mecanismo de “ataque o huída”) que prepara el cuerpo para actuar.

Uno de los efectos de esto es el aumento del flujo sanguíneo y, con ello, el rubor facial o ponerse “colorado”. Además, en etapas de la excitación más próximas al coito, esto provoca el engrosamiento de zonas íntimas y aumento de la sensibilidad precisamente por ese mayor flujo sanguíneo.

Por eso las mujeres cuando se maquillan se ponen colorete en las mejillas precisamente. Para potenciar este atributo.

Por tanto, por ejemplo:

Si después de un cumplido tuyo o un comentario más atrevido por tu parte en medio de la conversación, sus mejillas toman un leve tono sonrojado, puede ser buena señal.

Esto puede darse, no solo en las mejillas, sino también en las orejas o el pecho.

Exposición inconsciente de zonas erógenas

Hablamos de cuando, sin darse cuenta, ella muestra más piel o deja ver zonas como el cuello, la clavícula o las piernas.

Al igual que pasaba con morderse el labio, es un gesto involuntario que la hace mostrar partes del cuerpo que, evolutivamente, son más atractivas para el hombre. De forma que consiga llamar tu atención.

Obviamente, vivimos en una sociedad hipersexualizada que, por norma general, opaca la mayoría de estas señales.

¿Por qué?

Porque, de base, las mujeres buscan aumentar al máximo el número de opciones entre las que elegir al mejor con el que optimizar al máximo su estrategia reproductiva femenina (hipergamia).

Por eso hasta en lugares menos sexualizados como el ambiente laboral, cuando no hay códigos estrictos de indumentaria, las mujeres van vestidas de forma que exponen ciertas partes y maquilladas con colorete y labios pintados.

No estoy juzgándolo o criticándolo, simplemente estoy describiendo algo que ocurre y que tiene una explicación evolutiva detrás. Lo cual me parece fascinante.

Pero Dani, las mujeres no nos maquillamos para los hombres. No te flipes.

Ya.

A mí no me tienes que dar explicaciones. Yo solo te digo lo que millones de años de evolución y biología han programado en nosotros como seres humanos.

Conscientemente tú no piensas en hacer todo esto para los hombres.

Pero millones de años de selección natural te predisponen a ciertos impulsos biológicos que te llevan, inconscientemente, a querer aumentar tus probabilidades de reproducción y, por tanto, a captar cuanta más atención masculina, mejor.

En cualquier caso y volviendo al tema.

Un ejemplo de este indicador en acción podría ser:

Que durante la conversación o la cita con ella ella se reajuste la ropa dejando ver sutilmente ciertas zonas más erógenas. Bien sea cruzando y descruzando las piernas con frecuencia o bajando ligeramente el escote al recolocarse.

Juego de piernas y pies

A nivel inconsciente, el cuerpo tiende a orientarse hacia aquello que le interesa o atrae.

Por eso se dice que si sus pies apuntan hacia ti suele ser una señal sutil de interés.

Además, por otro lado, sabemos que la excitación o atracción sexual genera tensión y microansiedad. Por tanto, mover las piernas, balancear los pies o cruzar y descruzar los tobillos favorece la descarga de esta tensión.

Por otro lado, al hacer estos movimientos, se dejan sutilmente expuestas zonas más vulnerables (como acabamos de ver antes) lo cual subcomunica cierta apertura y disponibilidad.

Por eso se dice que todos estos movimientos o juegos de pies pueden indicar cierto interés sexual.

Por ejemplo:

En la práctica se daría de forma que, mientras charláis, observas cómo mueve su zapato con el pie o mantiene los pies orientados hacia ti.

Aromas sexuales y feromonas

Esta es, con diferencia, la señal que menos vas a poder percibir conscientemente.

Sin embargo, a nivel evolutivo tiene una explicación.

Las mujeres, especialmente en fases fértiles o de excitación, emiten compuestos volátiles (feromonas o semioquímicos) que el sistema olfativo del hombre capta de forma subconsciente.

Ejemplos de estos compuestos son la copulina (sí, no es coña el nombre) o el estratetraenol que están presentes en secreciones vaginales o en el sudor.

Estos compuestos generan en el hombre la activación del hipotálamo y con ello un ligero aumento en el deseo o la atracción. Esto suele generar una percepción como agradable, cálido o íntimo.

Obviamente el papel de las feromonas en el ser humano es mucho más débil que en otros mamíferos.

Pero aún tenemos cierta herencia de esta característica porque, antes de la comunicación verbal, las señales olfativas ayudaban a:

  • Detectar fertilidad.
  • Evaluar compatibilidad genética.
  • Generar un vínculo emocional y sexual.

Por tanto…

Esta es la explicación detrás de que, por ejemplo:

Puedas llegar a percibir ciertos aromas agradables y naturales que parecen potenciarse cuanto más tiempo pasas a su lado.

Aunque no lo percibas de forma consciente, cuando una mujer está excitada libera feromonas que incrementan su olor corporal característico.

Lenguaje corporal en una mujer excitada: Conclusiones finales

El lenguaje corporal de una mujer excitada es una mezcla de comunicación no verbal, comportamiento seductor sutil y señales físicas automáticas.

Pero más allá de lo obvios y trillados que están este tipo de “signos”, especialmente en seducción, es interesante ver cómo, en el fondo, la naturaleza y la biología ha orquestado tanta precisión en nosotros.

Aprender a detectar y leer estos microgestos te puede ayudar a calibrar mejor cada interacción y detectar cuándo una mujer está realmente interesada en ti de forma sexual y no sólo social.

La mayoría de las veces cuando sientes que “hay feeling” y no sabes explicar por qué es precisamente porque subconscientemente has detectado varias de estas señales.

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